Días de tensión

Así fue el dramático secuestro del padre de Julio Iglesias

El padre del cantante había sido secuestrado por la organización terrorista ETA

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MDZ Entretenimiento sábado, 12 de noviembre de 2022 · 21:01 hs
Así fue el dramático secuestro del padre de Julio Iglesias
A principios de los 80', el padre de Julio Iglesias fue secuestrado por el grupo terrorista ETA.

El doctor Julio Iglesias Puga, padre del cantante Julio Iglesias, fue secuestrado el 29 de diciembre de 1981. Alfredo Fraile, mánager del intérprete, fue quien recibió la llamada de la Dirección General de la Policía de Madrid, donde se notificó la situación. Pronto se supo que el doctor había sido secuestrado por dos terroristas de ETA que se hicieron pasar por periodistas para poder ingresar a su propiedad y llevárselo.

Esta historia fue contada por Joaquín Domingo Martorell, el policía que detalló cómo logró resolver el secuestro más mediático de la década y el cual, terminó por cambiarle la vida.

El doctor Julio Iglesias Puga era un reconocido ginecólogo en esa época.

El papá de Enrique Iglesias se sentía culpable por el secuestro ya que lamentó no haberle puesto guardaespaldas a su padre, aunque ya había recibido amenazas de que podía ocurrir un rapto. El secuestro de Julio padre fue una noticia que se conoció a nivel internacional ya que se trató de uno de los raptos más mediáticos de la historia.

El doctor Julio Iglesias Puga era un reconocido ginecólogo madrileño que fue raptado a los 66 años de edad y su consultorio estaba ubicado en el centro de la capital española. Antes de lo sucedido, pasó unos días con el cantante en Miami y cuando regresó a su natal España, dos personas se presentaron en su casa haciéndose pasar por periodistas. Asi fue que estas personas agendaron una cita con él para entrevistarlo al día siguiente, es decir, la mañana del 29 de diciembre, y cuando llegó la hora, el doctor abrió la puerta y se encontró con tres hombres armados. De esta manera, lo obligaron a bajar al estacionamiento en donde lo ataron y lo obligaron a meterse a la cajuela del auto y cuando despertó, estaba en una habitación en donde había una cama, tres sillas y un balde para hacer sus necesidades.

Los secuestradores del padre de Julio Iglesias se hicieron pasar por periodistas.

Se denunció su desaparición cuando no llegó a sus citas programadas y de inmediato iniciaron con las investigaciones. Los secuestradores se comunicaron 48 horas después para pedir la suma de 10 millones de dólares. Siempre se sospechó que los responsables eran integrantes del grupo terrorista ETA, ya que en esos mismos días habían raptado a un conocido empresario.

Las autoridades seguían todas las pistas que había, pero el rescate del padre del cantante ocurrió prácticamente por casualidad. Obtuvieron información de que en una casa del pueblo de Trasmoz, en Zaragoza, podría estar el empresario José Lipperheide. Sin embargo, cuando ingresaron, no encontraron al empresario, sino al papá de Julio Iglesias, quien estaba aterrado en la esquina de la cama y creyó que iban a matarlo.

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