El 65% de los empresarios cree que su situación estará peor en el próximo trimestre

En plena crisis económica, agravada por la pandemia de coronavirus, más del 65% de las empresas considera que su actividad económica empeorará en el próximo trimestre, pese a las ayudas económicas anunciadas por el Gobierno nacional y la flexibilización de la cuarentena.   

Así lo revela una encuesta realizada por SMS - San Martín, Suarez & Asociados que fue llevada a cabo entre el 8 de abril y el 6 de mayo y contó con la participación de 131 empresas de 11 países de América.

De ese total el 54,20% son de Argentina. El resto proviene de Ecuador (11,45%), México (6,11%), Estados Unidos (3,05%), El Salvador (3,05%), Guatemala (1,53%), Bolivia (1,53%), Brasil (0,76%), Chile (0,76%), Colombia (0,76%) y Haiti (0,76%). 

“Las respuestas vinculadas estrictamente con las finanzas de los encuestados, señalan que, habiendo ya transcurrido en cierta medida el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO), su situación era frágil. El 44% manifestaba que sus reservas alcanzaban para afrontar los compromisos correspondientes a los próximos 30 días, o menos, y el 33% contestó que no podía abonar íntegramente los salarios de su personal”,  señaló el director de Finanzas Corporativas de SMS, Ricardo Proganó.

En este contexto, un dato llamativo es que el 35,21% de los empresarios argentinos manifestaron que no utilizaban ninguno de los beneficios del Programa de Asistencia al Trabajo y la Producción, publicado a través del decreto 332/2020 el 1 de abril de 2020 por el Gobierno nacional.

"Este dato parece indicar que se presentaban limitaciones que desincentivan su utilización. De hecho, el programa fue modificado por el DNU 376/2020 con posterioridad a la realización de esta encuesta”, indicó Proganó

El resto de las empresas aseguraron que optaron por solicitar la postergación/reducción de contribuciones patronales (39,44%), Asignación Compensatoria al Salario (15,49%), y REPRO Asistencia Emergencia Sanitaria (9,86%)

Al ser consultados sobre como considera que será su nivel de actividad en los próximos 3 meses, el 41,22% respondió que “moderadamente peor” y el 24,43% optó por “significativamente peor”. Mientras que un 22,14% consideró que estará “moderadamente mejor” que en el presente y un 12,21% pronosticó que se mantendrá igual.

No obstante, pese a las dificultades, el 67,18% de los encuestados consideraron que podrán pagar los salarios el mes próximo. Un 25,19% podrá hacerlo de manera “parcial” y un 7,63% no podrá hacerlo.

Un aspecto interesante, que da una perspectiva de las nuevas modalidades que se adoptarán luego de la pandemia, es que el 39,92% respondió que implementó el teletrabajo, cuando fueron preguntados acerca de qué medidas han tomado frente a la emergencia. 

Por otra parte, el 14,83% disminuyeron los turnos de trabajo, 5,32% redujeron la plantilla del personal, 20,91% revisaron acuerdos con los proveedores, 12,93% refinanciaron pasivos, y 6,08% recortaron remuneraciones/beneficios.

Asimismo, al ser consultados sobre cómo lo está afectando la emergencia, donde existía la posibilidad de indicar más de una opción, se repartieron entre dificultades en la cadena de pagos, relacionado con la cobranza (26,91%), disminución / interrupción del nivel de la demanda (24,46%), incapacidad para cumplir en tiempo y forma con los pagos de las obligaciones financieras (15,90%), problemas  en la distribución/ logística/ cadena de abastecimiento (13,76%) e inconvenientes en la continuidad operativa de la producción de bienes o de servicios (18,96%).  

Por último, ante esta situación, la mayoría coincidió en que un alivio de la presión tributaria serviría para ayudar a sus empresas. Así, las opciones diferimiento de impuestos (25,38%), beneficios tributarios (24,11%) y moratorias impositivas (8,88%) fueron opciones elegidas por los encuestados ante la pregunta sobre las medidas macro que serían necesarias ante esta situación.  Mientras que un 16,50% optó por subsidios directos y un 21,32% prefirió que se facilite el acceso al financiamiento a tasas subsidiadas.

Entre los consultados, 52 se identificaron como propietarios de “manufactureras” y 63 como “proveedores de servicios” de distinto tipo (lo cual incluye también comercio). Mientras que los restantes 16 señalaron pertenecer al rubro “otros”. 

A su vez, 80 se definieron como micro y pequeñas (con una dotación de 40 empleados), 43 se calificaron como medianas (entre 41 y hasta 500 empleados) y 8 como grandes (más de 500 empleados).

El informe completo