El FMI redujo la previsión de crecimiento de Latinoamérica en 2009
Según la última estimación del Fondo Monetario Internacional, la economía de los países de América Latina avanzará un 3,2 por ciento el año que viene y 4,6 por ciento este año. La economía más prodigiosa será la de Perú, con el 9,2 por ciento en 2008 y el 7,0 por ciento en 2009.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) redujo hoy la previsión de crecimiento de Latinoamérica para 2009 al 3,2 por ciento en el marco de la crisis económica mundial y advirtió una vez más del peligro de la alta inflación en el continente en la presentación del informe "Panorama Económico Mundial" en Washington.
Te Podría Interesar
"Las economías de Latinoamérica se enfrentan a una mezcla delicada de desaceleración económica, condiciones externas más difíciles y niveles de inflación aún altos", afirmó el subdirector de estudios del organismo, Charles Collyns.
El crecimiento en 2008 en la región alcanzará el 4,6 por ciento, según el Fondo. "Tras 4 años de vigoroso crecimiento, el ritmo se desaceleró en la mayoría de las economías de la región durante el primer semestre de 2008 y se prevé que se debilite aún más", corroboró Collyns.
El mayor crecimiento de la región corresponderá, según el informe, a Perú, con el 9,2 por ciento en 2008 y el 7,0 por ciento en 2009. Pero el motor seguirá siendo Brasil, con un crecimiento el 3,5 por ciento el próximo año, a pesar de que su previsión se redujo en medio punto.
La otra gran economía de la zona, México, sufrirá por los efectos de la grave crisis por la que pasa Estados Unidos. "La actividad continuará siendo débil en México mientras las exportaciones y las remesas sean lastradas por la ralentización de Estados Unidos".
Los problemas del gigante económico de norteamérica también afectarán a Centroamérica, que se ralentizará por el impacto de la bajada en las remesas, el comercio y el turismo estadounidenses.
Especialmente preocupante para todo el continente es la inflación, que en agosto alcanzó de media el ocho por ciento, la mayor cifra en cinco años. A pesar de las bajadas de precios de materias primas y la ralentización del crecimiento de la demanda, la inflación se mantendrá en cifras de dos dígitos en países como Bolivia, Paraguay y Venezuela.
Al igual que el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional (FMI) también consideró explícitamente en el informe que los cálculos de la inflación en Argentina están devaluados. "Analistas creen que la inflación real en Argentina es considerablemente más alta que la cifra oficial del 9,0 por ciento en agosto", afirma el informe.
Respecto al futuro, el Fondo aseguró que los países latinoamericanos podrían verse aún más afectados si la crisis mundial se acentúa y los precios de las materias primas caen bruscamente.
Por ello, Collyns afirmó que "las autoridades económicas deben estar dispuestas a tomar las medidas necesarias para preservar la estabilidad macroaeconómica y las perspectivas de crecimiento a largo plazo".
"El margen de maniobra será mayor para aquellos países que hayan aprovechado mejor las recientes condiciones económicas favorables para consolidar su situación fiscal y establecer una credibilidad en la política monetaria", sentenció.
Los problemas del gigante económico de norteamérica también afectarán a Centroamérica, que se ralentizará por el impacto de la bajada en las remesas, el comercio y el turismo estadounidenses.
Especialmente preocupante para todo el continente es la inflación, que en agosto alcanzó de media el ocho por ciento, la mayor cifra en cinco años. A pesar de las bajadas de precios de materias primas y la ralentización del crecimiento de la demanda, la inflación se mantendrá en cifras de dos dígitos en países como Bolivia, Paraguay y Venezuela.
Al igual que el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional (FMI) también consideró explícitamente en el informe que los cálculos de la inflación en Argentina están devaluados. "Analistas creen que la inflación real en Argentina es considerablemente más alta que la cifra oficial del 9,0 por ciento en agosto", afirma el informe.
Respecto al futuro, el Fondo aseguró que los países latinoamericanos podrían verse aún más afectados si la crisis mundial se acentúa y los precios de las materias primas caen bruscamente.
Por ello, Collyns afirmó que "las autoridades económicas deben estar dispuestas a tomar las medidas necesarias para preservar la estabilidad macroaeconómica y las perspectivas de crecimiento a largo plazo".
"El margen de maniobra será mayor para aquellos países que hayan aprovechado mejor las recientes condiciones económicas favorables para consolidar su situación fiscal y establecer una credibilidad en la política monetaria", sentenció.