La economía creció 7,7 por ciento en septiembre, según un estudio privado
Pese a la aceleración económica del tercer trimestre respecto del segundo, en promedio el indicador acumuló en nueve meses un crecimiento de 6,1 por ciento anual, mientras que en igual período de 2007, la expansión había sido de 8,5 por ciento.

La economía argentina creció 7,7 por ciento en septiembre respecto de igual período de 2007, cifra que denota síntomas de desaceleración, según un informe del Centro de Estudios Económicos de Orlando Ferreres.
"La crisis con el campo impactó durante el segundo trimestre, arrojando la menor expansión desde 2003 (5,1 por ciento). A esto se suman factores estructurales como la elevada utilización de la capacidad instalada, un contexto de precios distorsionados y costos en ascenso, intervención en los mercados de exportación y falta de financiamiento", señala el documento.
Además, advierte que "la crisis financiera internacional prevé recesión en las economías desarrolladas, impactando en el precio de los commodities de exportación local".
"En particular, Brasil con un crecimiento más moderado y un real más devaluado tendrá consecuencias negativas para Argentina (18 por ciento de las exportaciones argentinas se dirigen al país vecino)", indica.
Los inconvenientes internos e internacionales harán bajar el nivel de expansión económica, que este año se ubicaría en el 6 por ciento, según Ferreres.
Pese a la aceleración económica del tercer trimestre respecto del segundo, en promedio el indicador acumuló en nueve meses un crecimiento de 6,1 por ciento anual, mientras que en igual período de 2007, la expansión había sido de 8,5 por ciento.
El comercio registró en septiembre un alza del 8,2 por ciento en un año, el transporte creció 6,9 y la industria manufactura exhibió un incremento del 7,3, según el estudio.
La actividad industrial, en parte explicada por un rebote técnico tras el magro crecimiento en agosto de 3,6 por ciento, impulsó a las actividades vinculadas.
Por otra parte, el rubro agricultura y ganadería acumula una caída de 0,9 por ciento en nueve meses y en 2009 las perspectivas no son muy alentadoras, advierte el CEE.
"En particular, la agricultura enfrentará menores precios y las cosechas en 2009 caerán producto de la menor siembra de trigo (23 por ciento) y de maíz (13,6), aunque en este último caso podría mejorar el resultado por las recientes precipitaciones", sostiene el documento.
"La crisis con el campo impactó durante el segundo trimestre, arrojando la menor expansión desde 2003 (5,1 por ciento). A esto se suman factores estructurales como la elevada utilización de la capacidad instalada, un contexto de precios distorsionados y costos en ascenso, intervención en los mercados de exportación y falta de financiamiento", señala el documento.
Además, advierte que "la crisis financiera internacional prevé recesión en las economías desarrolladas, impactando en el precio de los commodities de exportación local".
"En particular, Brasil con un crecimiento más moderado y un real más devaluado tendrá consecuencias negativas para Argentina (18 por ciento de las exportaciones argentinas se dirigen al país vecino)", indica.
Los inconvenientes internos e internacionales harán bajar el nivel de expansión económica, que este año se ubicaría en el 6 por ciento, según Ferreres.
Pese a la aceleración económica del tercer trimestre respecto del segundo, en promedio el indicador acumuló en nueve meses un crecimiento de 6,1 por ciento anual, mientras que en igual período de 2007, la expansión había sido de 8,5 por ciento.
El comercio registró en septiembre un alza del 8,2 por ciento en un año, el transporte creció 6,9 y la industria manufactura exhibió un incremento del 7,3, según el estudio.
La actividad industrial, en parte explicada por un rebote técnico tras el magro crecimiento en agosto de 3,6 por ciento, impulsó a las actividades vinculadas.
Por otra parte, el rubro agricultura y ganadería acumula una caída de 0,9 por ciento en nueve meses y en 2009 las perspectivas no son muy alentadoras, advierte el CEE.
"En particular, la agricultura enfrentará menores precios y las cosechas en 2009 caerán producto de la menor siembra de trigo (23 por ciento) y de maíz (13,6), aunque en este último caso podría mejorar el resultado por las recientes precipitaciones", sostiene el documento.