Murió Jessi Combs, la mujer más rápida del mundo, intentando batir un récord
La piloto estadounidense de 36 años sufrió un accidente cuando intentaba batir un récord de velocidad en un vehículo de 52.000 caballos de potencia.
La piloto estadounidense Jessi Combs murió a causa de un accidente mientras intentaba superar un récord de velocidad en un vehículo de cuatro ruedas.
Terry Madden, miembro del equipo de Combs, confirmó hoy a través de su cuenta de Instagram la muerte de la piloto, y adelantó que pronto se emitirá un comunicado oficial con los hechos.
Combs intentaba mejorar un récord de velocidad a bordo de un vehículo a reacción construido por ella misma y su equipo de 52.000 caballos de potencia. Su récord era de 640 kilómetros por hora.
El año pasado intentó batir su marca y alcanzó 777km/h antes de que un problema mecánico acabara con el intento, dado que es necesario realizar dos tandas consecutivas en direcciones opuestas para establecer un récord oficial de velocidad.