Bochornosos incidentes entre las parcialidades de Boca y Gimnasia en Rosario

El bochorno se hizo nuevamente presente en una cancha de fútbol en una de las pocas posibilidades que nos da el fútbol argentino para presenciar un partido con los dos públicos. A pesar de que el primer tiempo entre Boca Juniors y Gimnasia y Esgrima de La Plata en el estadio Coloso Marcelo Bielsa de Rosario había sido tranquilo entre las parcialidades. El entretiempo cambió todo.

Hinchas de Gimnasia comenzaron a lanzar butacas hacia una de las plateas de Boca y los simpatizantes del Xeneize las devolvieron. Los enfrentamientos entre ambos fueron incrementándose en tensión. A pesar de los intentos de los propios futbolistas que intentaban detenerlos. 

Los incidentes en el Coloso Marcelo Bielsa

Luego, la barra de Boca ubicada en la popular rompió el portón que divide esa cabecera con la platea de Boca y muchos de los hinchas pertenecientes a La 12 se cruzaron para enfrentarse con el cordón policial que separaba la platea xeneize con el pulmón. Los efectivos comenzaron a reprimir con balas de gomas y gases lacrimógenos.

Fue en ese momento que intercedió el presidente de Boca, Juan Román Riquelme, quien él mismo se metió en medio del flujo de barras que se trasladaban de una tribuna a la otra, para detenerlos en su marcha y solicitarles que se marchen a la otra tribuna. Lo logró, ya que su presencia fue respetada por mucho de los que anteriormente se encontraban protagonizando el incidente.

La intervención de Riquelme

Al cabo de unos minutos, el juez Jorge Baliño dialogó con las autoridades para retomar el partido y fue lo que se terminó decidiendo. Al momento del pitazo inicial de la segunda parte, todavía había hinchas de Boca que no se marchaban hacia la cabecera popular. La policía reforzó la zona del pulmón.