Los Pumas cumplen 10 años en el Rugby Championship

El 12 de agosto de 2012 quedará marcado para siempre en la historia del rugby argentino. Cape Town, el mítico estadio de Newlands, tuvo el bautismo de Los Pumas en el Championship, el remodelado Tres naciones, en la caída 27 a 6 ante Sudáfrica. Esta nueva edición del certamen que inicia mañana en Mendoza, significará una década compitiendo con los tres colosos mundiales, un tremendo acierto que significó un crecimiento incalculable.

Luego del histórico tercer puesto en el Mundial de Francia 2007, era claro que Argentina debía dar un salto para competir con los mejores y ahí iniciaron las gestiones, con Agustín Pichot a la cabeza, para ser parte de un certamen que era propiedad de los tres mejores seleccionados de la historia. Un desafío enorme, primero por la magnitud de los rivales (campeones de ocho de los nueve Mundiales disputados hasta aquí) y segundo por la ingeniería que implicaba jugar del otro lado del mundo y con un calendario (el del Sur) que va a contramano del que regía a sus jugadores (el del norte).

Son diez las  ediciones en las que ya participó Argentina, terminando cuarto en ocho de ellas, tercero en 2015 y escolta en 2020, torneo que no contó con los Springboks. Fueron 52 partidos en total, con 43 derrotas, 3 victorias (Australia 2014 en Mendoza, Sudáfrica como visitante en 2015 y nuevamente a los Springboks en 2016 en el juego disputado en Salta) y 6 empates (uno de ellos, la primera vez que Los Pumas sumaron en el certamen: el 16-16 en el Malvinas Argentinas).

El estadio Malvinas Argentinas es, sin dudas, un escenario que le sienta muy bien al combinado nacional por los resultados que consiguió: el primer empate en la historia de la competencia contra Sudáfrica 16-16 en 2012, el triunfo ante Australia 21-17 en 2014 y el éxito a los Springboks 32-29.

Del plantel que debutó en la competencia allá por 2012 son tres los jugadores que estarán en el décimo aniversario: Nicolás Sánchez, Juan Imhoff y Agustín Creevy, aunque ninguno lo hará en la formación titular del debut ante Australia. El objetivo está claro: seguir compitiendo en la elite y poder extender el crecimiento más allá de una década.