Mundial de Rugby

Aguas termales y menos celulares, las claves del buen clima en los Wallabies

El plantel de Australia ha tomado algunas medidas que ayudaron a los jugadores a crear un fuerte lazo. Entre ellas, se destacan el evitar el uso de celulares en la concentración y las relajantes aguas de los onsens japoneses.

jueves, 26 de septiembre de 2019 · 16:05 hs

Hace cuatro años, Australia aparecía en la Copa del Mundo bajo el radar: comenzó de manera eficiente, llegando a lo espectacular, y terminó jugando la final.

La sensación de que algo similar puede estar en el futuro de los Wallabies en las próximas cinco semanas, está comenzando a crecer, tanto dentro como fuera de la concentración.

Kurtley Beale jugó un papel clave en el camino de Australia hacia la final en la edición anterior, y el fullback está contento de estar ya trazando paralelos. "Hay similitudes, sin duda", dijo Beale, "una de las mejores cosas del equipo del 2015 es lo unidos que éramos fuera de la cancha y esa creo que es una de las cosas que nos puede llevar al siguiente paso".

Esa cercanía parece haber nacido en la espectacular Nueva Caledonia – una isla remota en el Pacífico Sur. "No había señal de celular allí por lo que los muchachos pudieron conectar", dijo el pilar Sekope Kepu sobre la preparación para el Mundial.

"Pasamos tiempo juntos, practicando paddle boarding, haciendo diferentes actividades. Ha habido grupos en el mejor café que pudimos encontrar en la isla, jugando a las cartas y juegos de Nintendo. Simplemente hicimos lo que teníamos que hacer".

La unión de equipo no es nada nuevo, pero después de tres años difíciles desde que cayeron en la final ante los campeones de Nueva Zelanda, los Wallabies parecen haber encontrado algo especial en los últimos 12 meses.

"Todo empieza con trabajar duro juntos y ser expuestos a circunstancias donde hay que luchar uno por el otro y sacar adelante a tu compañero, sea cual sea la adversidad", dijo Kepu. El hecho de que su equipo se haya recuperado de estar 21-12 abajo a principios de la segunda mitad contra Fiji en su primer partido del Grupo D el sábado, da mayor valor a esas palabras.

Esa unión, que parecía ausente en el 2018 cuando los Wallabies perdieron nueve de sus 13 test matches, ha estado recibiendo ayuda en Japón.

"Los onsens (baños termales) acá en Japón, han sido geniales para los chicos que son un poco tímidos, para estar totalmente expuestos", dice Kepu, mientras su risa no oculta el papel real que han estado jugando las saunas japoneses. "Ha sido genial para simplemente tener la oportunidad de reunirnos, sentarnos y hablar de cualquier cosa que les esté pasando".

La satisfacción puede, por supuesto, ser inestable ante una derrota ante Gales, el domingo, pero el impulso parece estar creciendo en base a los especialistas de Copa del Mundo. El entrenador de defensa Nathan Gray, quien formó parte del staff en el 2015 y ganó el Mundial en 1999 como jugador, está contento con lo que está viendo.

"Confiamos en las cosas que los muchachos hacen, han estado haciendo y continúan haciendo, nos mantendrán firmes", declaró Gray. "Construir esa confianza y respeto mutuo es fundamental. Hemos estado buscando generarlo tanto dentro como fuera del campo de juego".