Un hombre en taparrabos escandalizó a Málaga y lo detuvieron

Le llamaron "exhibicionista". Pero a decir verdad, eso no sería lo más grave por lo que acusar a un hombre que, en la mañana caliente de Málaga, fue detenido por andar en "taparrabos" por las playas, sino porque se aduce que pronunció una serie de frases provocadoras a niños y que "hasta los rozó", según cuenta el Diario Sur de es ciudad.

El diccionario de la lengua española (RAE) define taparrabos como "pedazo de tela u otra cosa estrecha que cubre solo los genitales". Y así definieron los agentes el atuendo con el que un joven polaco de 29 años se coló entre los niños que jugaban en un parque acuático de la capital bajo la mirada de sus madres, escandalizadas ante el "mínimo tamaño" -es literal del informe policial- de la prenda de baño del individuo, "que además vestía malamente, mostrando así su pene".

De acuerdo con la crónica policial de Diario Sur, el "exhibicionista", que habría llegado incluso a "rozarse" con los niños, acabó siendo retenido por el director del distrito de Carretera de Cádiz, Juan Carlos Giardin, que además es policía local en excedencia. El agente, apartado temporalmente del servicio por su actividad política, mantuvo a buen recaudo al joven hasta la llegada de sus compañeros, que le leyeron los derechos y lo trasladaron a la Comisaría Provincial para instruir diligencias.

Los hechos sucedieron en el parque acuático público que hay en la calle Pacífico, en Málaga capital. Fue el propio director del distrito quien telefoneó a la sala del 092 de la Policía Local para informar de que tenía retenido a un individuo que estaba causando "disturbios y desórdenes", ya que se encontraba con el bañador "parcialmente bajado", mostrando sus genitales a todos los presentes.

Los funcionarios pudieron comprobar la actitud "hostil y agresiva" que mostraba el individuo tanto hacia ellos como hacia las dos personas que lo tenían retenido, a los que dirigía constantemente expresiones soeces, muchas de ellas de carácter sexual, del tipo: "Oye tú, ven aquí y tira de ésta", "me vais a chupar la polla todos" o "venid aquí y agarradme los cojones".

Sin embargo, sí que se acercaron a los agentes varias personas para informarles de que, minutos antes de lo ocurrido en el parque acuático, el mismo sujeto había recorrido los establecimientos de la zona con el pincho de plástico, hostigando a los clientes y pidiéndoles dinero "de forma intimidatoria".